miércoles, 9 de enero de 2013

Declinaciones Latinas
¿Que son?


La declinación del latín es el conjunto de formas en que se declinan los sustantivos, adjetivos, pronombres y determinantes del latín.

¿Para que sirven en el español?


La declinación es un procedimiento morfológico de las palabras (en concreto de sustantivos, adjetivos y pronombres, que son los que actúan como núcleo de sintagma nominal) para expresar distintas relaciones gramaticales dentro de una oración. Así la declinación tiene el objeto de marcar el sujeto de una oración, el objeto directo, el indirecto y otras relaciones sintácticas.
Usualmente el procedimiento es algún tipo de alteración mediante sufijación, infijación, prefijación o metafonía. Ese tipo de alteración se denomina también flexión nominal (en contraposición a la flexión verbal o "conjugación") y consiste en la modificación de algunos de los morfemas constituyentes de las palabras. Esta alteración produce un cambio puramente gramatical, a diferencia de la derivación, que produce un cambio semántico.
  Este sistema de casos del latín ha desaparecido por completo de los nombres en la mayoría de lenguas romances, aunque sigue siendo usado en los pronombres personales, también algunas lenguas románicas como el rumano, el francés antiguo y algunas lenguas retorrománicas en sus estadios antiguos poseen caso. Las demás lenguas sólo conservan un sistema de casos hoy en día, mientras que otras, conservan vestigios.

 ¿Como funcionan en el latin?

 El conjunto de formas permite diferenciar tres categorías género gramatical, número gramatical y caso gramatical. El género gramatical puede tener tres valores (masculino, femenino y neutro), el número dos (singular y plural) y el caso hasta seis formas (aunque frecuentemente dentro de un paradigma varias de las formas son iguales).
El latín tiene cinco paradigmas o "modelos de declinación". Cada modelo de declinación se basa en el tema o terminación de la raíz (y en los adjetivos también su género gramatical). Los diferentes casos se expresan mediante un sufijo (o morfema gramatical) añadido a la raíz de la palabra. La flexión de los adjetivos varía según su género gramatical.
El análisis tradicional de los paradigmas distingue seis casos: nominativo, vocativo, acusativo, genitivo, dativo y ablativo (marginalmente existen residuos de caso locativo para algunas pocas palabras).


    En latín la flexión nominal o declinación se suele distribuir, por lo que se refiere a los sustantivos, en cinco grupos (las 5 declinaciones), según como termine el tema de la palabra. Se distibuyen así:
        -1ª declinación: temas en -a-
        -2ª declinación: temas en -o/e-
        -3ª declinación: temas en consonante o en -i-
        -4ª declinación: temas en -u-
        -5ª declinación: temas en -e-

Por sus afinidades podrían considerarse agrupadas de la siguiente forma:
a) La primera y segunda presentan bastantes rasgos comunes y comparten una clase de adjetivos.
b) La 3ª y 4ª están relacionadas entre sí y comportan los temas consonánticos y afines (-i-, -u-).
c) La 5ª es una declinación tardía y de escasa utilización, cuyas afinidades van unas veces con la 1ª y 2ª, otras con la 3ª y 4ª. Se la podría considerar una declinación mixta.
        Al añadir a los temas las desinencias, el choque entre ellos produce frecuentemente alteraciones que dificultan el reconocimiento del tema. Para asegurar entonces la adscripción de cada sustantivo a su declinación, se suele utilizar la terminación del genitivo del singular (y, en su defecto, del plural). Así:
        1ª declinación: Genitivo singular en -ae
        2ª         "       :       "         "          "   -i
        3ª         "       :       "         "          "   -is
        4ª         "       :       "         "          "   -us
        5ª         "       :       "         "          "   -ei

        Basta pues la enunciación de un nombre por su nominativo y genitivo para garantizar la declinación a la que pertenece.
        No obstante, si queremos descubrir el tema, lo más fácil y seguro es acudir al genitivo del plural: si le quitamos la desinencia -um(/-r-um) a éste, lo que nos queda es el tema (aunque no siempre con toda exactitud).
--------------------
        Los neutros, en cualquier declinación, tienen iguales el Nominativo, Vocativo y Acusativo (En plural, además de iguales, acaban en -a).
        Las declinaciones 1ª y 5ª no tienen nombres de género neutro. La 4ª y 5ª no cuentan con adjetivos.


¿Que relevancia tienen en la transformacion de las palabras?

  En el castellano su importancia radica en los plurales derivan del acusativo (plural en -s).El más destacado es la declinación de los pronombres personales según la función gramatical que cumplen (sujeto, complemento directo o complemento indirecto).

Declinación de los pronombres personales en castellano
Función/Pronombre yo él/ella/ello nosotros/as vosotros/as ellos/ellas reflexivo
Sujeto yo él/ella/ello nosotros/as vosotros/as ellos/ellas -
Complemento directo me te lo/la/lo nos os los/las se
Complemento indirecto me
a mí
te
a ti
le, se
a él/ella/ello
nos
a nosotros/as
os
a vosotros/as
les, se
a ellos/ellas
se
a sí


 Oscar Palacios Solis
Reyes Cortez Javier
Reyes San Agustin Omar Alejandro

TABLA RESUMEN DE LAS DECLINACIONES LATINAS

martes, 8 de enero de 2013

La tercera declinación

La tercera declinación

La tercera declinación agrupa en latín una gran variedad de palabras. Básicamente se pueden agrupar en dos:    

  • Temas en consonante: al añadirse la desinencia -s a dicha consonante su raíz queda 'desfigurada' de diversas formas: 'leo', 'dux', 'consul', ... En estos casos si queremos formar cualquier otro caso que no sea el nominativo singular nos fijaremos en la raíz del genitivo.
  • Temas en -i: presentan un nominativo en -is: 'navis', 'civis', etc. En el plural su genitivo es en '-ium'.
  • Temas mixtos: algunas palabras han perdido sus particularidades de temas en -i en el singular. Presentan por tanto un nominativo del tipo 'mens', 'mors', etc. pero formas de genitivo plural en '-ium': 'mentium'.

Particularidades de los temas en -i :

Ablativo singular en -i: en principio su ablativo singular era en -i pero con el tiempo tomaron el ablativo en -e propio de los temas en consonante. Aun así lo conservan:
  • Los neutros que tienen ya un nominativo en -e.
  • Los adjetivos, por el mismo motivo.


Segundo tipo de adjetivos

Son los adjetivos que se flexionan  siguiendo la tercera declinación. Corresponden al tipo que en español tiene una sola forma como 'fuerte', 'hábil', etc. Pero el más común en latín es el de dos terminaciones: una para masculino y femenino y otra para neutro.

  • Adjetivos de dos terminaciones:
Estos adjetivos presentan una forma en -is para masculino y femenino y otra en -e para el neutro. Estos adjetivos tienen un ablativo singular en -i en vez de -e.
   
Quitando el nominativo y el acusativo las demás formas son iguales para masculino, femenino y neutro.

Un subgrupo lo forman algunos adjetivos que presentan tres terminaciones como 'acer, acris, acre'. La flexión del masculino 'acer' y del femenino 'acris' sólo se diferencia en el nominativo y vocativo singular.

  • Adjetivos de una sola terminación:
Dentro de este grupo podemos encontrar algunos de tema en consonante y otros de tema en -i.
  • Tema en consonante: presentan la declinación típica de dichos temas con formas neutras diferenciadas sólo en nominativo y acusativo como 'vetus, veteris'.
  • Temas en -i: del tipo 'prudens, prudentis' o 'felix, felicis'. Este tipo es el que siguen los participios de presente como 'amans, amantis'. Tienen un genitivo plural en -ium y un neutro plural en -ia.
 
 
Reyes San Agustin Omar Alejandro

primera y segunda declinacion

La 1ª declinación

La mayor parte de las palabras de la primera declinación son femeninas. Todas ellas presentan un nominativo acabado en -a y un genitivo en -ae. Normalmente han pasado al español como femeninos en -a también. Así tenemos 'selva' del latín 'silva' o 'via' del latín "via".


En todo caso existen algunos masculinos como poeta, nauta, etc.


La 2ª declinación

Esta declinación recoge masculinos con nominativo singular terminado en -us y genitivo en -i. Casi siempre han dado lugar a masculinos en -o en español. Así tenemos 'amicus': 'amigo' o 'populus': 'pueblo'.


Particularidades:

Dentro de ella existe un grupo de palabras que tienen el nominativo singular (y también el vocativo) acabado en -er. Así 'puer', o 'magister'.


Los neutros de la 2ª declinación

La segunda declinación recoge también sustantivos neutros. Estos siguen la misma declinación que los masculinos con la única salvedad de presentar una forma de nominativo en -'um': 'bellum' igual al acusativo y una forma de nominativo y acusativo plural en -a.


Primer tipo de adjetivos


En latín existen básicamente dos tipos de adjetivos. El sistema es bastante similar al del español. Así en nuestro idioma podríamos distinguir:
  • Adjetivos del tipo 'buena, bueno' con masculino en -o y femenino en -a.
  • Adjetivos del tipo 'fuerte' con una sola forma que puede ser masculino y femenino.
El primer tipo de adjetivos en latín presenta tres formas: masculino y neutro siguen la segunda declinación y el femenino la primera. Por ejemplo 'bonus, bona, bonum'.

Algunos adjetivos presentan un nominativo masculino en -er. Son del tipo 'pulcher', 'pulchra', 'pulchrum'.



 Reyes Cortes Javier

Las declinaciones latinas


El latín es una lengua flexiva, es decir, tiene palabras que  varían de forma (igual que en castellano), cuando les añadimos o quitamos prefijos o sufijos (por ejemplo, pensad en el sustantivo castellano "niña": si le quitamos el sufijo femenino "a", y se le añade el masculino "o"; si se le añade el sufijo de plural "s", la palabra varía y su significado también).

La palabra "rosa" significa en latín "rosa". Este sustantivo adaptará una u otra forma según la función que tenga en la oración. Si es sujeto, se escribirá "rosa"; pero si es objeto directo, será "rosam".

Ejemplo:

Rosa est pulchra (la rosa es bella; aquí "rosa" es sujeto y por eso se escribe "rosa").
Puella dat rosam matri (la niña da la rosa a su madre; aquí "rosam" es el complemento directo, por lo que termina en "m").

Pero no corramos:

Las declinaciones son conjuntos de terminaciones para las palabras. Hay palabras que pertenecen, por su naturaleza , a la primera declinación (las que se enuncian como "rosa, rosae" (rosa,-ae), como "puella,puellae" (puella,-ae), o "dea,deae"(dea,,-ae). Otras, como "Dominus, Domini" o Thesaurus, thesauri", pertenecen a la segunda declinación; otras, a la tercera; otras, a la cuarta; y otras, a la quinta.

Nosotros vamos a fijarnos ahora en las palabras que pertenecen a la primera declinación. La declinación tiene una serie de casos o terminaciones para las palabras:

                  Singular                       Plural
Nominativo: Rosa                         Rosae
Vocativo:     Rosa                         Rosae
Acusativo    Rosam                      Rosas
Genitivo:      Rosae                       Rosarum
Dativo:        Rosae                       Rosis
Ablativo       Rosa                         Rosis

Ésta es la primera declinación. Hemos declinado la palabra "rosa", pero podríamos haber declinado cualquier otra palabra de la primera declinación...
¿Qué otras palabras hay de la primera declinación?
 natura, villa, , agricola, colonia, etc. No son todas, por supuesto.
En latín hay miles de palabras de la primera declinación. Pero éstas son las que se tienen que estudiar.

Otra duda : ¿por qué la palabra aparece así: "villa,-ae"?¿Qué significa "-ae"? Bueno, pues es la enunciación de la palabra, la forma de anunciarse o de presentarse, y la estudiamos así para que sepamos que es una palabra de la primera declinación, que siempre se enunciarán así: natura,-ae; incola, -ae, etc. En el diccionario se ve una palabra terminada en "-a,-ae", ya sé que se trata de una palabra de la primera declinación y  la tengo que declinar exactamente igual a como he declinado "rosa". Por eso así,  como están escritas: "vita,-ae".

Es como si fuera el carnet de identidad de la palabra. Se enuncia la palabra usando el nominativo y el genitivo singular "rosa" es nominativo y "-ae", como se ve arriba, es la terminación del genitivo singular.

¿Y qué son los casos y para qué sirven? El nominativo, vocativo, acusativo, genitivo, dativo y ablativo (falta el locativo, que veremos más adelante) son casos. Todas las declinaciones (de la 1ª a la 5ª tienen los mismos casos, sólo que la terminación de cada caso difiere según la declinación. En la primera declinación, el genitivo siempre terminará en "-ae", mientras en la segunda declinación (que  no hemos estudiado aún, terminará en "-i").

El nominativo va a servir para expresar el sujeto o el atributo.
El acusativo es el caso del objeto directo (también, con preposición, del circunstancial).
El Genitivo se usa para la función de complemento del nombre.
El dativo, para el objeto o complemento indirecto.
El ablativo, para el circunstancial (cuando va sin preposición, se puede traducir como "con, de , en , por".

Ejemplos:

Rosa está en nominativo porque es sujeto: Rosa est parva (la rosa es pequeña; el sujeto es "rosa", luego ha de ir en nominativo).
Rosa está en acusativo porque es CD: Amo rosam (amo a la rosa; la rosa es objeto directo, luego ha de ir en acusativo...si fuera plural también iría en acusativo, pero acusativo plural: "amo rosas", amo a las rosas)
Rosa esta en genitivo porque es complemento del nombre: Odor rosae (o "rosae odor") el olor de la rosa
Si quisiera decir que algo es bueno "para la rosa", la palabra "rosa" actuaría como Objeto indirecto "rosae", en dativo.
"Cum rosa" significa "con la rosa y va en ablativo , aunque también podría no llevar preposición , o ir acompañada de otra diferente a "cum".

Oscar Palacios Solis
Reyes Cortez Javier
Reyes San Agustin Omar Alejandro